La figuereta

Recordar es volver a vivir y al rememorar La Figuereta son innumerables los recuerdos y vivencias que pasan velozmente, pero con claridad, por mi pensamiento, lo que haría interminable esta colaboración que la Filá me solicita para la revista que edita después de los años de Alférez y Capitán.

¿Que era La Figuereta?, ¿donde estaba La Figuereta?. Para los más jóvenes, pues los más veteranos no necesitan de la explicación, La Figuereta era el nombre con el que se conocía el local social que la Filá dispuso desde principios de la década de 1950 hasta 1982, año que nos trasladamos al actual de la calle San Juan, y estaba situado en la calle Sant Nicolás n1 167, en San Nicolauet, pocos metros abajo de El Partidor.

Era un local muy reducido cuya puerta de entrada estaba al fondo del zaguán de la casa, después de subir unos pocos escalones de la escalera de vecinos; a continuación un pequeño distribuidor que a la derecha daba paso directamente, a través de una cortina de tela, a una minúscula y rudimentaria cocina, y al frente volver a bajar unos escalones, pasar por la puerta del aseo situado a la derecha, también ajustado y arcaico, unos pocos peldaños más y se llegaba al nivel de la única sala de que disponía. Una pequeña barra quedaba bajando a la derecha y al fondo dos ventanas y una puerta que daba acceso al patio descubierto trasero, con suelo de tierra, sin pavimentar, en el que se erguía una espléndida higuera de la que tomaba nombre el local. La forma del local interior era rectangular, de una anchura que no alcanzaba los cinco metros, una superficie que no llegaría a los 30 metros cuadrados y de una capacidad total que rondaría las 40 personas sentadas.

Y en estos pequeños espacios, interior y exterior, hicimos todo lo imaginable a pesar del tamaño y la escasa capacidad del conjunto: ensayos, reuniones, aperitivos, comidas, cenas, esperas del turno de salida en la Entrada, …, siempre con una gran unión de toda la peña de amigos.

Por todas esas vivencias que me es fácil recordar, no me cabe la menor duda que cobijados por la Figuereta d=els Gats hemos vivido infinidad de facetas de Nostra Festa; y además está en nuestra memoria de tal forma que puede ser la ventana por donde vemos a los ausentes, y a ellos son los que no podemos, no debemos olvidar, pues son los que reconstruyeron la Filá. Esto nos obliga a remontarnos forzosamente a los años cuarenta, concretamente a 1945, cuando Enrique Casasempere – Valter para los íntimos- vino a vernos a Julio Pastor y a mí para requerir nuestra ayuda y colaboración, ya que dos años más tarde le correspondía a la Filá el Alférez y se tendría que renunciar a los cargos si no encontraba apoyo externo.

En aquellos momentos los individuos de la Filá no eran más que cuatro gatos, y es por lo que Julio Pastor y yo reforzamos la escuadra de la Entrada de Cristianos del año 1945, como así lo demuestra la fotografía adjunta en la que se puede ver de izquierda a derecha a Jorge Segura, Julio Pastor, Jorge Silvestre, ?, Manuel Abad -el primer Tró apodado ACampana@-, ?, Enrique Casasempere y Justo Terol de cabo.

La gran personalidad de Julio Pastor y la influencia de los dos en los amigos, propició que nuestra peña poco a poco se integrara en Els Gats, logrando que el Alférez de 1947, representado por el viejo gato Cristóbal Llorens, Tofol, fuese muy digno. Y en la capitanía de 1948 de Paco Santonja Llacer fuera ya multitudinaria la presencia entusiasta de todos los amigos, lográndose un Capitán digno de elogio.

Y considero que es mi obligación el recordar a los ausentes ya que entre todos logramos que Els Gats, los Mozárabes, llegasen a ser una Filá prácticamente familiar y muy numerosa; lamentaría olvidar a alguno, pero si así fuese de antemano pido excusas: Pepito Sanz, Pepito Carbonell, Pepito Candela, Kiko, Francés, Ramúsculo, Arturo Minguez, Julio Pastor, Jorge Pastor, Juanito Muñoz Ael mursiano@, José García Parra, Pepito Payá, y sobre todos, Doro y Jaime, sin los cuales nuestros esfuerzos realizados para animar la Filá hubieran sido baldíos, ya que ellos dos -tanto monta, monta tanto- fueron los verdaderos aglutinantes, los que con su paciencia y amistad lograron que Els Gats no solo tuvieran continuidad, si no que se engrandecieran y consiguieron, con su buen hacer, la armonía entre todos y la participación continuada en Nostra Festa.

ASoy feliz porque sé gozar de los recuerdos@ y son tan importantes y necesarios en la vida que considero que debo transmitirlos a las generaciones de mis hijos, de mis nietos, para que recuerden su larga historia y ellos sepan continuar viviendo la Filá como lo hemos hecho nosotros.

Al ofrecerles estas vivencias a nuestros recientes Alférez y Capitán, Paco Jordá y Manolo Rico, a los que felicito con mi más sincero afecto, no deben olvidar que con su participación al representar el cargo han hecho historia Festera, tanto para la satisfacción de todos los individuos de la Filá como en beneficio de nuestras entrañables Fiestas de Moros y Cristianos.

 

Y termino como siempre. Per Alcoi y per Sant Jordi !!

Visca Sant Jordi !!

 

Jorge Silvestre Andrés Gat de honor